sábado, 24 de marzo de 2012

Ireri Castro





1 comentario:

Anónimo dijo...

Imagino el mundo del sueño, intento habitarlo, desde la mágica presencia tejedora de imagen, desde el ojo acompañante de mis noches, que amoroso custodia mis propios sueños y los torna gráficos, lo vivo parpadear, mientras me contemplan soñando los labios callados que murmuran mi nombre y van uniendo cada una de las letras, con las que escribiré el texto que transformará en vocablo, la esencia de nuestro sueño, el sueño común, manantial de imágenes, materia, formada por el arroyo de luz, donde se vuelve sueño el estar despierto a los sentidos.